“Marisa”, documental dirigido por el cineasta Jose Bellido, relata el final de la vida de Marisa Garteiz-Gogeascoa, muy conocida en Bilbao y Getxo por ser presidenta de honor de la Fundación Bakuva para la atención a niños desprotegidos y miembro del patronato de la residencia de ancianos de La Misericordia. La obra muestra los quince últimos meses de la vida de Marisa tras el diagnóstico de un cáncer de pulmón metastásico e irreversible.
El cineasta emplea dos herramientas narrativas propias del género documental: las grabaciones del teléfono móvil de Ignacio, hijo mayor de Marisa, y el testimonio de los familiares sobre la enfermedad, la vida y la muerte. Una tercera vía discursiva, sustentada en la narración del personaje recreado «Marisa» y en la plástica visual, se aleja del realismo documental y se adentra en la lírica existencialista.
La trama argumental propicia la reflexión sobre temas como la reacción ante el diagnóstico de una enfermedad grave, la actitud del paciente, la conciliación de la vida cotidiana y la enfermedad, los momentos de esperanza, los momentos de desazón y la ausencia. “Marisa” aborda la situación de duelo ante la pérdida de un ser querido de una manera profunda y humana. En este caso, muestra la interioridad del seno familiar en una historia que gira en torno a la figura de la madre/esposa.
Según José Antonio Isusi, marido de Marisa, el proyecto no fue concebido en su origen como un documental, sino como una obra para la intimidad familiar. Sin embargo, la idea fue evolucionando a medida que el proyecto iba creciendo, hasta el punto que Isusi consideró que el material reunido podía ser lo suficientemente bueno como para montar un documental que permitiera abordar el duelo ante la pérdida de un ser querido.
La Asociación Española contra el Cáncer ha decidido utilizar “Marisa” en sus programas de ayuda a afectados y familiares de pacientes con enfermedades tumorales.