Para reflexionar

Obras que te ayudarán a reflexionar sobre las despedidas

Un funeral de muerte

La muerte del patriarca de la familia de esta alocada película los reúne de nuevo para celebrar su funeral. Con el reencuentro de los hermanos y sus respectivas parejas, la tensión crece al recordar hechos del pasado. Al desarrollo de este caótico funeral no ayuda que uno de los hermanos haya ingerido accidentalmente un alucinógeno, ni la presencia de un invitado desconocido por la familia, el cual viene a destapar un importante secreto del difunto padre.

Un funeral de muerte es film de tinto cómico en el que la ceremonia funeraria sirve de excusa para ridiculizar cómo los desencuentros familiares incluso en estos momentos afloran hasta rozar el ridículo.  Oz maneja el ritmo de la película de forma eficaz, dosificando adecuadamente los gags,  las sorpresas,  y dándole una pátina de comedia negra para todos los públicos. El título pues podríamos decir que es más la excusa sobre el escenario que no una revelación sobre aspectos interesantes relativos a la muerte.

La mayoría de los gags están relacionados con uno de los personajes de la familia que se droga sin querer y empieza a sufrir alucinaciones de todo tipo, pero quizás abusa un poco demasiado de estas posibilidades. En cambio si que es acertado la incognita en la vida íntima del fallecido que es desconocido para el resto de la familia.

Un film pasable más bien de entretenimiento que para reflexionar, pero que sabe sacarnos una sonrisa con algo tan cotidiano como es la muerte desde una perspectiva en la que es necesario aceptarla y enfrentarse con humor. En este sentido el film puede inspirar a darnos una idea diferente sobre la muerte como queda patente en los créditos finales.

Esta película tuvo un remake en versión norteamericana estrenada en 2010 con el mismo título "Un funeral de muerte" pero dirigida por Neil LaBute y protagonizado entre otros por Martin Lawrence, Chris Rock y Zoe Saldana. Esta nueva versión sin embargo, no supera el clima de comicidad británica que es más acorde al planteamiento de la versión de 2007 de Frank Oz.

Desde mi cielo -película

Basada en la novela bestseller de Alice Sebold,  Desde mi cielo (The Lovely Bones) narra la historia de Susie Salmon, una chica perfecta (literalmente, no tiene defectos) que es asesinada por un pederasta en serie que ya ha reivindicado sus atrocidades con una docena de niñas antes. Es la década de 1970, y el narrador se asegura de que sabemos que las personas no eran tan conscientes de los peligros de los abusadores de menores en ese entonces.

La primera media hora de la película es absolutamente desgarradora -  pues sabemos que  Susie va a morir, porque  es ella misma quien nos cuenta su propia vida en off.  En este sentido, la película a diferencia del libro, se centra más en la pedofilia y la persecución de este crimen, que no en cómo la protagonista se imagina que sería su vida interrumpida brutalmente desde el cielo y como un espacio de transcendencia personal propia y el de su entorno.  

Peter Jackson, su director, conocido por su trabajo en la trilogía de El Señor de los Anillos, en Desde mi cielo, aprovecha sólo parcialmente el guión de la novela con un argumento que se centra más en la forma dramática y menos en la fantasía celeste de la narradora.   

Mientras el padre incapaz de aceptar el luto rompe sus barcos dentro de botellas, vemos que estas encallan en el más allá de Susie. La vida de la protagonista, de pureza y dulzura en la otra vida, poco a poco se verá forzada a aceptar su realidad, una realidad que el espectador ya conoce y que se le hace pesada. 

Algunos comparan el trabajo de Jackson con el que hizo Guillermo Del Toro con maestría en El laberinto del fauno: mostrar el horror puro del mundo "real" a través de los ojos de una niña, y luego demostrar como lo terrible se refleja a través de un prisma fantasioso. La cuestión es que en Desde mi cielo esperamos que Susie Salmon pueda salvarse a pesar de que no puede escapar a su propia narración.  

Una vez que esté muerta, ya no hay más terror. Lamentablemente, la vertiente más espiritual que trasluce el libro queda desdibujado por un exceso de imágenes simbólicas que para nada nos relatan esta mirada pura de la niña ya muerta. En todo caso, un buen ejemplo de una película de la que es mejor primero leer el libro.

Un monstruo viene a verme – película

Conor O´Malley (Lewis MacDougall) es un chico que a sus 13 años ha tenido que asumir muchas responsabilidades. Tras la separación de sus padres y la grave enfermedad que padece su madre (Felicity Jones), se ha visto obligado a tomar las riendas de su hogar. Además, debido al acoso escolar que sufre en el colegio, ha creado un mundo de fantasía plagado de hadas, duendes y demás criaturas maravillosas, que le permite escapar de su rutina y superar sus miedos. Porque incluso en su propio ambiente familiar, su inventiva tiene que enfrentarse incluso con la visión de su fría y calculadora abuela (Sigourney Weaver).

El autor de este cuento infantil, Patrick Ness, también guionista del film permite que su director, Juan Antonio Bayona pueda estirar el metraje para recrear su lado melodramático a la vez que el fantástico. Un cuento  o unos cuentos dentro de un cuento sobre las tinieblas que envuelven nuestras vidas  pero gracias a las cuales podemos iniciar un viaje emocional donde el drama no es más que la diferencia entre el mundo infantil con la del mundo adulto. Un relato adecuado para la adolescencia, esa fase en la que el ser humano crea sus propios demonios, sus miedos frente a la realidad, y que el protagonista compensa con la válvula de escape de una ficción terrorífica, pero terapéutica.

En Un monstruo viene a verme lo real y melodramático de la vida de Connor es la separación de sus pedres pero también la enfermedad irresoluble de su madre, y por tanto de la muerte y la complejidad de la vida. A partir de ahí nace la cita a los siete minutos pasada la media noche con su “monstruo” a través de la cual  se inicia la fantasia  de los encuentros de ese árbol gigantesco con el niño. Una fantasía que a modo de tres cuentos en forma de fábula le guiaran hasta la madurez.

A diferencia del cuento, la película combina una animación que gracias a sus sorprendentes técnicas permite suggerir el terror per a la vez la fantasía modelada de sentimientos y pensamientos útiles para sobrellevar la realidad. Esta adaptación al cine ha sabido captar la emotividad, sensibilidad y valores subyacentes en la historia original que emergent durante la adolescència.

Los insólitos peces gato

Película de Claudia Sainte-Luce que cuenta la historia de Claudia, una joven solitaria que es operada de apendicitis y que, en el hospital, conoce a Martha, una enferma de cáncer terminal y de agradable temperamento. Al agravarse la salud de Martha, Claudia establecerá con ella y sus hijos unos estrechos lazos, hasta convertirse en su apoyo.

El Abc de la muerte

Película basada en una antología de 26 cortos que muestra la muerte en toda su maravillosa y brutal belleza. A cada uno de sus realizadores se les asignó una letra del alfabeto que diera inicio a una palabra, que debieron usar para crear el corto.

Vivir para siempre

Película de Gustavo Ron que trata sobre Sam, un niño de 12 años al que le encanta recopilar historias y sucesos fantásticos. También quiere saber cómo se sienten los adolescentes porque él no llegará a serlo: tiene leucemia. Aunque los adultos sólo le responden con ambigüedades, él quiere conocer todos los datos y detalles sobre su muerte. Está dispuesto a averiguar las respuestas y por eso decide escribir un libro.